Jorge Llanos, un querido hermano, esposo, padre y abuelo falleció el 10 de enero de 2021, a la edad de 85 años.
Jorge nació el 23 de abril de 1935 en la cuidad de Cascas, Perú. A la edad de 20 años conoció al amor de su vida, Rosa Llanos. Se casaron en Lima, Peru y vivieron juntos y fueron casi inseparables durante 63 años.
La familia siempre fue lo más importante para Jorge. Fue el padre amoroso de Ana María, Jorge, Rita, Esperanza, Robert, Patricia y Miguel. Fue el orgulloso abuelo de 16 nietos y fue recordado con cariño por muchas sobrinas, sobrinos, primos, familiares y muchos buenos amigos.
Jorge era trabajador y era dueño de una tienda muebles y carpintería en Perú durante más de 39 años. Disfrutaba armar muebles y trabajar con sus manos. En sus últimos años, disfrutó de un sinfín de búsquedas de palabras, viendo películas del oeste y pasando tiempo con su esposa.
Jorge será recordado para siempre por su gran sonrisa, su risa contagiosa y su sentido del humor, su corazón cariñoso, y su amor incondicional. Aunque nuestro corazón está adolorido, celebramos su vida y encontramos consuelo de que él está en el cielo cuidándonos.
Jorge Llanos, a beloved brother, husband, father and grandfather passed away on January 10, 2021, he was 85 years old.
Jorge was born on April 23, 1935 in Cascas, Peru. At the age of 20 he met the love of his life, Rosa Llanos. They married in Lima, Peru and lived together almost inseparable for 63 years.
Family was always most important to Jorge. He was the loving father to Ana Maria, Jorge, Rita, Esperanza, Robert, Patricia, and Miguel. He was the proud grandfather to 16 grandchildren and fondly remembered by many nieces, nephews, cousins, extended family, and many good friends.
Jorge was hardworking and owned a furniture/carpentry shop in Peru for over 39 years. He enjoyed building and working with his hands. In his most recent years, he enjoyed endless amounts of word searches, watching westerns and spending time with his wife.
Jorge will forever be remembered for his warm smile, contagious laugh and sense of humor, caring heart, and unconditional love. Although our hearts are heavy, we celebrate his life and find comfort that he is in heaven watching over us.